FICHA TÉCNICA LA RUTA: EL BOSQUE DE LA HERRERÍA Y LA SILLA DE FELIPE II.
SALIDA: San Lorenzo de El Escorial, en el aparcamiento que hay en la Herrería. ALTITUD: 1000 M. HORA DE SALIDA: 10 de la mañana, saldremos de Los Molinos (colegio DIVINO MAESTRO) en coche, a las 9h 30 minutos, y llevaremos 2 vehículos, si fuéramos más de 10 personas necesitaríamos la ayuda de alguno de los participantes para completar la salida, llevando el suyo. TIEMPO ESTIMADO DURACIÓN: 4 a 5 horas. En realidad la ruta andando sería un tiempo de unas 4 horas escasas, pero la marcha en grupo y las paradas , dependerán del grupo y del interés que tengan en las interpretaciones y en el conocimiento de la zona. LONGITUD DEL RECORRIDO: 9 a 10 kms. NIVEL DE DIFICULTAD: Bajo- muy bajo. ALTITUD MÁXIMA : no llegaremos a los 1200 m. DESNIVEL: 150 mts, en caminos fáciles y tendidos. No hay cuestas difíciles.
RECOMENDACIONES: Las mismas de siempre, llevar gorra para protegernos del sol, si el día lo requiere, crema solar, agua y bocadillo para almorzar y para comer. En este caso, la ruta transcurre en la mayoría de su desarrollo a la sombra, bajo los bosques de la Herrería . Pero más vale prevenir que curar. En el tramo no hay fuentes, salvo la Fuente de la Reina, que puede estar seca dada la época del año, en la que aunque llovió, aún no corren los arroyos y manantiales. Llevar calzado adecuado para la época, bota de montaña no muy fuerte, y chubasquero por si nos cayera un chaparrón.
En cuanto a las recomendaciones ambientales y sobre la naturaleza, no debemos olvidar nunca que estamos en un lugar especialmente natural, en el que debemos cuidar al máximo la vegetación y las plantas que lo forman, no arrancar nunca ninguna planta, por abundante que nos parezca, y respetar en todo momento todo lo relativo a la misma, como los animales que viven en la zona, no molestándolos nunca, y dejándolos tranquilos.
También debemos caminar siendo lo más respetuosos posible con el entorno, no hablando muy alto, ni creando ruidos estridentes que molesten a los animales ni a las personas que puedan estar disfrutando del mismo placer de caminar por la naturaleza que nosotros. También se recomienda no salirse de los caminos, por los que vamos a caminar, y respetar en todo momento los consejos que nos dé el guía de la ruta sobre el recorrido, las paradas y también sobre el grupo, nuestra intención es ir todos juntos a lo largo del trayecto, no separarse del grupo, y no salirse del recorrido sin avisar al guía.
PRECIOS DE LA RUTA. Los precios de esta ruta, serán para las personas adultas de 10 € por persona, incluido en el mismo, el transporte, el seguro de accidentes, y el de responsabilidad civil de la ruta. Los niños entre 11 y 14 años pagarán la mitad, y los menores no pagarán si van con sus padres o responsables de los mismos. La ruta es fácil y no es larga, pero los niños muy pequeños pueden cansarse, y no se recomienda la ruta para niños menores de 7 años, salvo que sus padres se hagan responsables de ellos si se cansan. También entra en el precio, el guía ambiental que llevará al grupo durante todo el trayecto, y nos irá explicando lo más característico de la ruta tanto ambientalmente como históricamente, es decir la ruta será interpretada en todo el recorrido.
Esta ruta está organizada por elpradodeluis especialmente para familias y personas individuales, y para todo tipo de edades, es muy sencilla y muy interesante, y además iremos tranquilamente, sin correr, parándonos en los lugares que nos parezcan pintorescos, y tirando fotos.
Cualquier persona puede hacerla, y además de estos criterios, está especialmente diseñada para disfrutar de la época en la que estamos, para disfrutar del otoño en todo su esplendor, de los colores y contrastes, de las verdes praderas y de los azafranes serranos… de la naturaleza otoñal en San Lorenzo del Escorial. Para cualquier duda sobre la ruta, o sobre cómo puedes apuntarte, llamar al teléfono : 605278668, y preguntar por Luis.
DESCRIPCIÓN DE LA RUTA.
Esta ruta es la primera de las 4 que hemos propuesto para disfrutar del otoño en la Sierra de Guadarrama, y es una preciosa ruta que se desarrolla en el entorno del Bosque de la Herrería y la Silla de Felipe II, en el término municipal de San Lorenzo del Escorial y su entorno, ofreciéndonos unas estupendas vistas panorámicas del Monasterio del Escorial, de Abantos y de la Sierra de Guadarrama central, desde las Machotas hasta La Maliciosa.
Dicho esto, voy a empezar a describiros sin extenderme demasiado, cosa que nunca consigo, lo que vamos a ver en la ruta, lo más interesante, y más o menos por donde transcurre el camino que vamos a seguir. Empezaremos la ruta en la Herrería,, al lado del Monasterio, en un lugar mágico, lleno de praderas verdes y de historia, mucha historia. Sería un grave error por mi cuenta no comentar nada sobre el Monasterio. En este lugar, que ahora es un lugar público y de paseo para todo el mundo, lo que vamos a ver y a disfrutar, es de la naturaleza, sin olvidar la importante carga histórica que tiene el lugar, y que además sería prácticamente imposible explicar su estado actual sin la actuación del hombre en este entorno, desde hace siglos. En el comienzo de la ruta, hablaremos del monasterio, sin meternos en el monumento, en la importancia histórica que tiene ni en lo hecho por el hombre , solo un poco de historia para situarnos y entender la evolución de la naturaleza en esta zona, desde que Felipe II decidió construirle allí en 1563. Caminaremos en esta zona , que era la zona donde estaban los servicios necesarios para el monasterio y la corte, donde estaba la Herrería… donde se plantaban los huertos, y donde se cuidaba el ganado para el uso del mismo como alimento para la corte. En este sentido, es un lujo caminar por un lugar así, con tanta historia, y con tantas historias acontecidas entre sus muros, entonces dentro de las fincas propiedad del Monasterio y del rey claro. Y como tal, este lugar, tiene otras joyas naturales que son las que a nosotros nos interesan, y las que vamos a ver y a disfrutar en este día. Pero para entenderlo, tenemos que ponernos en situación, hace 450 años, cuando este lugar era un lugar lleno de bosques, en el que no había ni una casa, en una zona poco más que deshabitada , en la que el bosque de robles dominaba el paisaje, desde las Machotas hasta Abantos. También había en las zonas más húmedas fresnos y no había ni un hueco entre ellos, no había praderas despejadas y los animales campaban a sus anchas por toda la zona, desde los jabalíes, hasta los osos, pasando por zorros, lobos,, conejos, corzos, ciervos… estos en lo referente a los de interés cinegético, pero además alimoches, buitres, águilas y otros muchos pájaros abundantes por el robledal y la fresneda. Todos ellos eran muy abundantes, y esta fue una de las causas principales para la elección de este lugar para la ubicación del monasterio.
Es importante destacar esto, porque después de construir el monasterio, y del uso del monte para su construcción, y para leña para calentarse existen manuscritos y lienzos que demuestran que todo el monte Abantos se quedó pelado, sin un Roble, que era el árbol dominante en este lugar hasta la misma cima de la montaña. Se taló todo, dejando la montaña desprotegida, y en cambio, en las zonas que pertenecían a la corona, en los terrenos del monasterio, se conservó en perfecto estado, hasta hoy el Bosque de la Herrería, donde los reyes cazaban a su antojo, y donde nadie podía entrar allí a cortar la leña claro. Y en esta zona donde estamos, se clareó el bosque de robles y fresnos, para el uso del pasto, y el cuidado del ganado. Se adehesó esta zona, dejando algunos robles y fresnos para sombra y para su uso en el desmoche de los mismos, para alimento del ganado en los momentos necesarios, y se quedaron las praderas que ahora podemos ver, espléndidas y verdes, que han llegado hasta nuestros días. Resulta difícil hacerse a la idea de ver el monte Abantos sin un árbol, y toda esta zona llena de gente, de ganaderos, herreros, huertos, y todos los oficios, y carretas, caballos, de todo tipo…escoltas , soldados, en fin… echarle imaginación es fácil…
pero ahora lo que tenemos, es toda esta zona adehesada, llena de praderas y caminos para uso público, y algunos ejemplos que nos muestran la historia de este lugar, solo con fijarnos un poco. Bajando por este camino hacia la Ermita de la Virgen de Gracia, vamos a pararnos un momento para ver los otros monumentos que tenemos en estas praderas, algunos de ellos, testigos mudos de todos estos hechos, y que llegaron vivos a nuestra época. En esta dehesa, hay ejemplares impresionantes de fresnos, con un perímetro considerable, que aún perduran, en el tiempo. Son los ejemplares más longevos de fresnos de toda nuestra sierra, y que son verdaderos monumentos naturales que han soportado el paso del tiempo, y todos los desmoches que el hombre les ha ido practicando a lo largo de los siglos. Veremos unos cuantos de estos ejemplares, y los tocaremos, que impresionan, y en algunos de ellos podremos hasta meternos dentro de su tronco. Y también disfrutaremos de las maravillosas vistas que tenemos del Monasterio desde aquí, entre los fresnos y los robles enormes, y al fondo Abantos , como lo conocemos ahora, lleno de pinos repoblados a finales del siglo XVIII.
Ahora me fijo y veo que de breve… nada, como siempre, pero es muy importante este punto para conocer todo lo que vamos a ver, y todo lo que ahora tenemos en esta zona. En apenas una hora escasa habremos atravesado esta primera zona, preciosa zona llena de Robles y Fresnos, más recientes, y de toda la vegetación que de forma espontánea, vuelve a recuperar sus especies autóctonas, una vez no se utiliza para el pastoreo intensivo. En el camino veremos, Majuelos, Endrinos, Zarzamoras, Robles, Fresnos, Baradagueras, retamas y otras especies introducidas por el hombre, como frutales, plátanos de sombra…etc… un lugar que aún hoy, sigue siendo precioso, lleno de árboles y plantas, verde, y tranquilo. Lo de los animales es otro tema, aunque también hay muchas aves y pájaros por la zona, y algún zorro y corzo… son difíciles de ver, pero es un lugar muy natural y muy bonito, y en cierta manera. Aunque nos lo parezca a nosotros, así, también es un lugar modelado y alterado a lo largo de los siglos por el hombre.. esto es así.
Seguimos camino desde la Ermita por un camino que sale a la derecha asfaltado por un pequeño tramo, hacia la finca El Castañar, que era otra de esas fincas que pertenecían al monasterio en un principio. Cogeremos un sendero que sale a la derecha, que transcurre por el robledal autóctono y salvaje, magnífico bosque que se conserva como un verdadero bosque de robles, lleno de vegetación arbustiva por el suelo, muy tupido, y muy interesante. Veremos a través de todo el camino como es el robledal desde dentro, que plantas tiene, y que características principales. En este bosque también podemos ver Arces y un poco más adelante, Castaños y avellanos. El camino rodea toda la finca, y fuera de las lindes de la finca, hay ejemplares importantes de castaños, evidentemente introducidos por el hombre, porque en este lugar no había castaños, junto con otras especies que el paso del tiempo, y los agentes externos, han propagado por las cercanías de la misma.
Ahora están ahí, asilvestrados, formando parte de su masa arbórea, que es más variada que en otros lugares, y por lo tanto tiene mucho colorido otoñal.
En este tramo te sientes verdaderamente dentro de un bosque, que hoy en la Sierra de Guadarrama, es difícil de sentirlo, salvo en los pinares de la montaña. Este bosque es uno de los mejor conservados de la Sierra de Guadarrama, y junto con el de Lozoya y La Golondrina, y algunas matas sueltas por ahí… son los restos que nos quedan del antiguo bosque de robles, que dominaba todo nuestro entorno, hasta los 1700 metros de altitud. Y lo estaremos viendo, en pleno centro, el lugar es muy interesante. La Ladera de la montaña, se ve muy fresca, y húmeda y por su orientación soleada, podemos contemplar un tupido bosque de robles, con otras muchas especies que solo se dan en las zonas húmedas, salpicados entre ellos, y un poco más arriba, también entre los pinos , los enebros y también alguna encina, que también en las zonas más secas y soleadas, dominaba entonces el panorama. En este punto, vamos a caminar por un camino con muy buen firme, ya no es sendero, del que parte una ruta auto guiada, en el que explican con carteles informativos, la vegetación de esta zona, la arbórea y la arbustiva, de la que quedan aún bastantes carteles y bastantes infraestructuras, de lo que inicialmente era una ruta auto guiada y con varias infraestructuras accesibles para sillas de ruedas, y con una parte de cartel en escritura para las personas ciegas. Es decir, es un camino adaptado para todo tipo de personas, incluídas los discapacitados, y muy bien descrita en los paneles informativos. Este tramo es muy corto, apenas de un kilómetro y medio, pero que cada uno podría entretenerse mucho a leer lo que pone en los carteles, es ,muy llano y suave el camino, y también muy interesante. Iremos tranquilos y podremos entretenernos un poco en ver todo esto, pero sin pasarnos, porque esta senda, necesita una salida especialmente dedicada a ello, sino , no terminaríamos la ruta… de hoy. Poco a poco, según nos vamos alejando de la ladera húmeda del bosque de robles , la vegetación se hace más dispersa, y menos rica, volvemos a la realidad, al clima mediterráneo, más seco, y más propio de la solana a la que está orientada. Empezamos a ver encinas, enebros, plantas aromáticas, algún arce y robles dispersos. Estamos llegando a la Silla de Felipe II. En pocos minutos estaremos allí, es el objetivo final de la ruta, y desde allí podremos contemplar en una atalaya espectacular todo esto que hemos visto, desde arriba, toda la masa del robledal y las vistas de las Machotas, Abantos, las dehesas y praderas y el Monasterio en una vista impresionante de la rampa serrana desde San Lorenzo hasta Cercedilla, y toda la cuerda de la sierra hasta La bola del Mundo y La Maliciosa. Casi nada. Estaremos un rato por allí, intentando verlo, todo, porque imagino que al llegar hasta allí la carretera , estará llena de turistas y domingueros, y el consiguiente bullicio que provoca cuando hay gente en masa en un lugar así. Después bajaremos por el otro lado al lugar de partida. Bajaremos por el GR-10 hasta la zona adehesada, donde veremos las preciosas praderas verdes, salpicadas con mesas de madera para comer, en sitios idílicos, llenos de Azafranes serranos, probablemente, y de gente también… y en alguna de ellas nos pararemos a comer, y a charlar un rato antes de volver a casa. Si tenemos un buen día, cosa que así parece por las predicciones, volveremos a casa llenos de imágenes en nuestra retina, y de historias y curiosidades en nuestra mochila, y espero que sea para todos un día inolvidable.